“El Congreso chileno aprueba finalmente el protocolo de Madrid después del impulso del Gobierno” es el título del reciente artículo publicado en la prestigiosa revista World Trademark Review, escrito por el asesor sénior de Villaseca Abogados, Sergio Amenábar.
A continuación, reproducimos íntegramente el artículo. Este fue divulgado originalmente por WTR Daily, parte de World Trademark Review, el 31 de agosto de 2021. Para más información, visite www.worldtrademarkreview.com.
El Congreso chileno aprueba finalmente el protocolo de Madrid después del impulso del Gobierno
· El Congreso ha aprobado finalmente el Protocolo de Madrid tras una intervención del gobierno.
· Muchos partidos acogen con satisfacción la aprobación, considerando que la adhesión al protocolo es una consecuencia inevitable de la globalización.
· Sin embargo, los disidentes cuestionan el impacto en las empresas chilenas, así como las disparidades entre el número de marcas extranjeras y locales privilegiadas por el tratado.
Luego de dos décadas de dudas, el Congreso chileno finalmente aprobó el Protocolo de Madrid para el Registro Internacional de Marcas. Esto fue luego de que el gobierno enviara al legislativo una nueva iniciativa sobre el tema, la cual fue otorgada con una celeridad inusual.
Según el mensaje enviado al Congreso por el gobierno, los objetivos de esta aprobación son:
· actualizar las normas legales chilenas;
· apoyar la innovación;
· ayudar a las empresas chilenas a ingresar al escenario mundial de las marcas; y
· armonizar la práctica local con la de otros países, considerando los diversos tratados de libre comercio (TLC) suscritos por Chile.
La aprobación administrativa del tratado aún no ha concluido, por lo que será necesario realizar algunos arreglos formales internos y establecer declaraciones nacionales en cuanto a términos para el rechazo de solicitudes internacionales, entre otros asuntos.
Se prevé que estos pasos estarán finalizados en diciembre, cuando por fin Chile pueda ratificar el protocolo con la OMPI.
Si bien todavía no se conoce una reacción uniforme de las empresas nacionales, las opiniones de los expertos profesionales están, como es habitual, divididas sobre el tema.
Algunos comparten la creencia del gobierno de que el protocolo es una consecuencia inevitable de la globalización, así como de los TLC que Chile ha suscrito, incluyendo con la Unión Europea y Estados Unidos.
Otros no están de acuerdo con la aprobación y afirman que ha habido una falta de opiniones diferentes sobre el tema y, en particular, una ausencia total de estudios sobre el impacto del protocolo en las empresas chilenas. Sin embargo, a pesar de esto, los disidentes en gran medida parecen haber aceptado la aprobación, reconociéndola como inevitable tarde o temprano.
Sin embargo, algunos especialistas continúan sosteniendo que el protocolo entra en conflicto con la actual Constitución chilena debido a:
· contradicciones con los derechos de propiedad que ya se han concedido; y
· diferencia cuantitativa significativa entre el número de marcas extranjeras y locales privilegiadas por el tratado, como ha sido el caso en otros países de América Latina (por ejemplo, México y Colombia) que ya se han adherido al Protocolo de Madrid.
Si bien una convención está preparando una nueva versión de la Constitución del país, la versión actual seguirá siendo válida hasta que entre en vigor una nueva.
Desde un punto de vista comparativo y respecto a las reformas recientemente aprobadas a la Ley de Propiedad Industrial de Chile, este grupo de críticos apunta a medidas destinadas a evitar el mantenimiento de registros especulativos, uno de los principales riesgos del tratado en análisis, que solo fueron endurecidos por esa reforma. Sin embargo, el hecho sustantivo es que el protocolo ya ha sido aprobado por los dos órganos estatales competentes legislativos involucrados.